Cuidado con los desacuerdos frente a los hijos.
La promoción de espacios saludables es un recurso que garantiza el bienestar emocional y físico de sus integrantes. Algunas parejas que no han logrado en el tiempo madurar procesos de vinculación sana pueden caer en ciertos errores como es el caso tener frecuentes desacuerdos frente a los hijos. Esto no solo es un indicador de malestar, sino que los hijos pueden aprender un estilo de comunicación deficiente. Los hijos no saben a quién seguir o escuchar.
En caso de que uno de los padres, establece una norma o sanción y el termina contradiciendo, generando confusión en la mente de los hijos.
Si bien es cierto, cada familia hace un modelo de crianza partiendo de las experiencias que tienen de sus familias de origen y las expectativas que construyen en su interacción con el medio. No existe un manual exclusivo para criar, pero si existen evidencias de estilos usados por los padres que afectan el desarrollo de los hijos cuando no se ponen de acuerdo.
Dentro de las principales consecuencias están:
- Perdida de respeto sobre los hijos.
- Establecimiento de un modelo confuso en la crianza.
- Establecimiento de límites difusos.
¿Qué pueden hacer los padres para superar esta barrera?
Lo más recomendable es que los padres no expongan sus diferencias delante de los hijos y mucho menos que se desautoricen. Es sano que hablen sin la presencia de los hijos para que expliquen sus argumentos y puedan llegar al mejor acuerdo.
o Respetar las diferencias que existe en la pareja.
o Comunicar sin deseos de imponer las ideas.
o Procurar tener actitud de escucha.
Cuando se cría se debe considerar hacerlo positivamente. ¡La comunicación y el compromiso es un asunto compartido!!
Ivonne Guzmán
Psicóloga clínica y terapeuta familiar